miércoles, 10 de septiembre de 2008

Controlan la pesca en Tucumán

La Dirección de Fauna de la Provincia detectó irregularidades en los diques. Los pescadores se embarcan generalmente sin los chalecos salvavidas en la mayoría de los casos Atractivo que debe preservarse la pes­ca es un deporte que ocu­pa un lu­gar pri­vi­le­gia­do den­tro de la ac­ti­vi­dad tu­rís­ti­ca. Hay pro­vin­cias que des­ti­nan pre­su­pues­to pa­ra pro­mo­cio­nar­la, co­mo en el Li­to­ral, don­de agre­gan el plus de la de­vo­lu­ción de las cap­tu­ras pa­ra re­cu­pe­rar el equi­li­brio per­di­do por la de­pre­da­ción hu­ma­na. En Pezcalandia entendemos que no es lo único que se hace al respecto y tampoco consideramos depredación humana la pesca deportiva. Tu­cu­mán re­sur­gió co­mo des­ti­no tu­rís­ti­co y sus prin­ci­pa­les pes­que­ros man­tie­nen su atrac­ti­vo gra­cias a las ta­reas de re­siem­bra y de con­tro­les pa­ra evi­tar la pes­ca fur­ti­va y los ex­ce­sos de la ma­yo­ría de los pes­ca­do­res. Nosotros sobre este párrafo entendemos que lo que se debe controlar es el descontrol, la pesca comercial, los pescadores en su gran mayoría son deportista y cada dia mas se pesca con devolución Pe­ro es­tas ta­reas re­sul­tan in­su­fi­cien­tes. Son po­cos los ins­pec­to­res pa­ra cu­brir to­da la geo­gra­fía tu­cu­ma­na. Es­te mar­co apro­ve­chan tras­ma­lle­ros y afi­cio­na­dos pa­ra ex­traer can­ti­da­des de pe­je­rre­yes pa­ra co­mer­cia­li­zar­los y pa­ra re­par­tir, y ya pren­die­ron la luz de alar­ma por el da­ño in­fli­gi­do al equi­li­brio na­tu­ral. Estos son los motivos de depredación , uno de ellos, los que se debe castigar con todo el peso de la ley, multas, decomisar equipos y hasta prisión Tam­bién cau­sa es­tu­por que al­gu­nos pes­ca­do­res de­por­ti­vos ig­no­ren el to­pe de ex­trac­cio­nes por jor­na­da, ya que son re­fe­ren­tes en cuan­do al res­pe­to a las nor­mas. No son todos referentes se debe informar!! esa es una función estatal de cada zona En ca­da con­cur­so, en to­tal se ex­traen más de 1.000 uni­da­des. Pá­rra­fo es­pe­cial pa­ra fun­cio­na­rios pro­vin­cia­les que usan la “cha­pa” pa­ra sos­la­yar la ley y “apa­dri­nar” las de­pre­da­cio­nes, cuan­do son ellos los obli­ga­dos a pre­di­car con el ejem­plo.La Dirección de Flora, Fauna Silvestre y Suelos determinó, a través de sus inspecciones rutinarias, que la mayoría de los botes que salen a navegar no tienen los elementos de seguridad ni sus identificaciones. Si bien cuando hay controles las lanchas permanecen en los embarcaderos (en La Angostura, principalmente), sus propietarios esperan que se marchen los inspectores para internarse en los diques. Esta actitud temeraria pone en grave riesgo la integridad de los pescadores, ya que no cuentan con la totalidad de los elementos que se requieren (silbato, balde, sogas, bengalas, handy o celular), y en especial el chaleco salvavidas.En el caso de los botes que se venían alquilando en El Mollar, el director de la repartición provincial, Manuel Imbert, aclaró que el o los propietarios no están autorizados a prestar ese servicio. En este sentido, puso énfasis en que la única manera de lograr los permisos para explotar el alquiler de botes es a través de una concesión de servicio, en la que se exige de los postulantes las inscripciones en la AFIP, en Rentas de la Provincia y seguros de vida, entre otros requisitos.Además, Imbert apuntó que en todos los casos debe pagarse a la repartición un canon anual por el uso de la reserva natural, tanto en lo referido al beneficio comercial como a la explotación del recurso (peces) a través del alquiler de los botes para que se realice la pesca deportiva.Respecto de los catamaranes, Imbert indicó que tampoco pueden salir a navegar porque no tienen permiso, pero sobre todo por la precariedad en cuanto a su estabilidad y navegabilidad.En lo referido a los controles de las licencias de pesca y de las extracciones de piezas permitidas, las inspectoras tuvieron inconvenientes en El Cadillal y en La Angostura, ya que algunos pescadores se resistieron a la requisa y otros, literalmente, huyeron. Sobre estos hechos, el funcionario destacó la actitud mesurada de las inspectoras para evitar roces con los “rebeldes” y la labor que vienen cumpliendo en función de preservar la fauna ictícola.Asimismo, Imbert indicó que en las diferentes ferias que se realizan en la capital y el interior se secuestraron especies de la fauna silvestre autóctona (rey del bosque, reina mora, loros y catas). La comercialización de estas aves está prohibida por Ley 6.292. Informe de Daniel Salvador Textos Jorge Vicente de Pezcalandia Por Osvaldo Ripoll La Gaceta