viernes, 3 de febrero de 2012

Para pesca embarcada no hay como El Cóndor

Te contamos en Pezcalandia, que la promesa de una pesca variada en la zona del estuario del río Negro, frente a las costas del balneario El Cóndor, merece una salida embarcada para capturar generosas piezas. Corvinas y pescadillas suelen quedar en las fotos de aficionados e inexpertos que se animan a hacer un viaje en lancha para encontrar un buen lugar en ese entorno natural, y después contar las aventuras a amigos y familiares.
Con el acompañamiento de un buen guía de pesca y algunos consejos para vivir una jornada inolvidable, las excursiones de pesca embarcada deportiva siempre se desarrollan en condiciones climáticas favorables. Los capitanes explican hasta el mínimo detalle cuando hay que cruzar la rompiente de la "barra" del río Negro.
Es un punto riesgoso que mezcla el agua dulce y la salobre, lleno de bancos que sólo ellos conocen por contar con moderno equipamiento de navegación. Luego de trasponer ese límite, las embarcaciones anclan donde está el cardumen a unos 1.500 metros de la playa, en un vértice imaginario formado por el faro Río Negro y la desembocadura. Darío Martínez lleva unos cuantos veranos en este oficio, con un casco para 12 pasajeros que opera desde "El Pescadero", la playa del río ubicada a pocos metros de la margen marítima sur. "Estos días hemos tenido buena cantidad de capturas; trasladando gente de Buenos Aires, Mendoza, y algunos locales que se van 'chochos' con los pescados", destaca.
Asume con franqueza que la zona tiene algunas desventajas en infraestructura. Las lanchas se bajan desde un lodoso cangrejal en el que hay que esperar que suba la marea. Además, con los vientos reinantes y la barra no pueden concretar varios viajes diarios como se hace en Bahía San Blas, la contigua playa bonaerense. Sin embargo, todos viven un clima optimista. Su colega, Sergio Lanfranco, destaca que el estuario se presta para asistencia a turistas de esta naturaleza. A su entender, "el pesquero de El Cóndor es una maravilla por la gran cantidad de peces que hay en virtud de que la salida del río para ellos es una gran productora de comida, entonces la gente valora eso, y los que vienen todos los años nos siguen visitando".
Algunos de los ejemplares capturados llegaron a un récord de seis kilos en la variedad corvina, con un promedio de dos kilos. Previo pago de una tarifa de unos 200 pesos, los aficionados, si lo desean pueden realizar el paseo. Los servicios se ofrecen completos, es decir con equipos de pesca incluidos. El tiempo de estadía -mar adentro- ronda las tres horas siempre que no haya un cambio en el estado del tiempo.
Fuente Rionegro.com.ar