domingo, 14 de octubre de 2007

Mi viaje a Puerto Madryn

Salimos temprano de Mar del Plata e hicimos noche en Viedma, paseamos un poco por la ciudad y su costanera del Río Negro, para continuar camino a Puerto Madryn. Llegando a Sierra Grande, quedan 45 kilómetros de muy mal camino. No entendemos como no se hace algo para mejorar el acceso ya que este problema viene de años por comentarios del Topo. Me lo contó antes que salgamos, esto viene de mucho tiempo atrás. Es una pena que el ingreso a nuestra Patagonia costera la presentemos en estas épocas de turismo de esta forma.
Llegar a Puerto Madryn es encontrarse con una ciudad hermosa, Jorge, hacía 13 años que había visitado donde esta ciudad donde esta radicado su amigo Mariano, noto una increíble evolución en esta década.Construcciones sobre la costa, al sur o norte, son de una arquitectura muy especial.
Turisticamente ha crecido muchísimo, complejos, hosterías, hoteles, comercios en zona céntrica, shopping; en fin, ha progresado y esta en latente crecimiento dado las obras que se ven en construcción. Su nueva vegetación, árboles, césped, sus flores, que antes se veían muy poco. Alejándose de la ciudad se encuentra nuevamente las zonas áridas y sus calles no cuentan con asfalto.
El domingo llegamos con un día maravilloso. El lunes fue levantarnos y ver el sol a pleno nuevamente así que decidimos partir hacia la península. Averiguamos la mejor hora para los avistajes y nos dijeron al mediodía así que nos dirigimos a Puerto Pirámide, a visitar a Mariano ( El gordo Ballena para Jorge, cariñosamente).
El Mar tranquilo con un azul intenso, embarcamos. Por suerte me animé, tenía dudas, pero al ver las condiciones del tiempo, y que las ballenas estaban relativamente cerca tome coraje y no me voy a olvidar nunca lo que vivimos(esto para Jorge y Mariano fundamentalmente es moneda corriente). Encontramos una, que ni bien nos vio hizo algunas piruetas y pasó por debajo de la lancha, parecía que nos saludaban!!!. La emoción es única, ver semejante ejemplar pasando por bajo nuestro te emociona hasta las lágrimas.
Mariano pone en marcha la embarcación y fuimos al encuentro de dos, un macho y una hembra. Un espectáculo maravilloso, no hay palabras, es tanto lo que te brindan, así lo entiendo, que quedas extasiada, es adrenalina pura. El acercase a la lancha y observarnos a medio metro nuestro, el salpicar con sus saltos, el aparecer repentinamente, el mostrarnos sus colas, en un momento las dos a vez, el pasar las dos por abajo de la lancha, en fin... Mariano dice “es por que vinieron conmigo”, yo hasta me lo creí, ya que todos los conocen a Mariano, él llego a instalarse muy joven en ese pueblito, 30 años atrás.
A la vuelta la lancha a toda velocidad timoneada por Jorge rumbo al puerto, el problema es que los autos pueden ser lo de el, pero las lanchas, huuu, pero bien, bah, inmejorable !!!!!. Recorrimos Puerto Pirámide, sus playas, mientras Mariano y Jorge se contaban sus anécdotas y sus historias de buceadores. Llegamos a la Lobería donde también se avistaban muchas ballenas.Nos despedimos de Mariano camino a Madryn, pasamos por la Isla de los Pájaros, estaba colmada de diversas variedades, nunca la había visto así.
Al otro dia fuimos a la mañana a las playas del Norte, El Doradillo, sol a pleno, calorcito. Visitamos varias playas, todas son distintas, con sus encantos naturales con sus rocas, arenas y acantilados que transforman la vista en un paraíso.Los pingüinos son muy lindos, es así como decimos en "Pezca" en Pezcalandia, siempre es un lindo dia ...
Por Laura Cacace
Staff Pezcalandia
Imagenes Mundo Argentina