lunes, 29 de octubre de 2007

Un nuevo dinosaurio de la Patagonia

En 1983, el Dr. José F. Bonaparte, director del Área de Paleontología de la Fundación, y en aquella época integrante del Museo Argentino de Ciencias Naturales de Buenos Aires, realizó una campaña a la localidad de La Amarga, en la provincia de Neuquén. Esa localidad daría numerosos materiales fósiles de importancia como el cuello-largo espinoso Amargasaurus y los pequeños mamíferos Vincelestes, además de estegosaurios, reptiles voladores y cocodrilos. Sin embargo, tan notables descubrimientos hicieron que se le prestara poca atención a otros hallazgos no tan bien preservados. Más de dos décadas después, el paleontólogo Lic. Sebastián Apesteguía, investigador de la Fundación y adscripto del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia, prestó especial atención a dichos restos y, revisando las notas de campo de Bonaparte, llegó a la conclusión de que algunos de los fósiles colectados por Bonaparte provenían de un mismo dinosaurio, al que estudió y nominó como Amargatitanis macni.
El trabajo científico fue publicado en el último número de la prestigiosa revista científica Gondwana Research, que se especializa en hallazgos realizados en continentes que durante la Era Mesozoica se hallaban en el hemisferio sur. El título del trabajo en inglés es “The sauropod diversity of the La Amarga Formation (Barremian), Neuquén (Argentina)”.
Fuente: Fundación de Historia Natural Felix de Azara.