En nuestro viaje visitamos la Villa Turística de Paso de la Patria, pesquero de dorados reconocido a nivel nacional e internacional, como ya nos habia anticipado la gente de Pezcalandia, nos encontramos muy cómodos allí
Generalmente pasamos varios días, pescando y visitando los muchos amigos que hemos cosechado a través de los años.
Teníamos planeada una salida de pesca en Paso de la Patria, estábamos instalados en el Hotel "Jardín del Paraná" esperando que mejorara el tiempo después de varios días de lluvia. Cuando mejoró preparamos todo para salir en busca de los grandes dorados de ese pesquero.
Por medio día compartiríamos la pesca con Juan Madia, un amigo y Matías Aquere, embarcamos con Patricia en la lancha guiada por Javier (sugus), y salimos agua abajo a pescar con carnada arriba de las piedras, lo primero que nos hizo notar el guía fué que con la tanza que teníamos (0.35) no íbamos a pescar nada grande, ya que los grandes al clavarlos salen muy fuerte entre las piedras y al rozar con la piedra la tanza se corta, sabias palabras, los tres primeros piques los perdimos de esa manera, como ya no había solución fuimos hasta punta Santa Ana, debajo de los cables a pescar doradillos, tanto en la lancha de Matías como en la nuestra capturamos varios dorados medianos, nos quedamos hasta el mediodía y regresamos al hotel, allí cambiaríamos la tanza por una 0.50 para la pesca de la tarde.
La pesca con carnada "en la piedra" consiste en pasar la morena directamente por arriba de la piedra, de manera que roce con los desniveles de ésta, son pasadas muy cortas, de pocos minutos, pero es una pesca muy participativa ya que el pescador decide en que momento clavar al pez y éste se refugia entre las piedras para escapar, generalmente se tranca muchas veces, pero hay que prever la pérdida de varios leaders y algunos metros de tanza, luego de una captura es recomendable cortar los primeros 15/20 metros de línea porque generalmente está rozada y mellada, además conviene cambiar el anzuelo luego de cada captura para asegurarnos que clave bien, y como les mencioné, hay que usar nylon de por lo menos 0.50 mm. para que aguante los roces contra las piedras. A la tarde invertimos la zona de pesca, ahora fué agua arriba, primero fuimos a las "piedras negras", hicimos varias pasadas y nada, de allí a la "toledo arriba" y tampoco hubo pique, luego a la piedra "del lapachito" (que se cayó), Patricia tuvo un pique y capturó un buen dorado de unos siete kilos, volvimos a pasar por si había otro pero parece que estaba solo, probamos en "la de brahma" y nada, decidimos jugar las últimas cartas nuevamente en las negras, pero sin duda no había dorados allí, le comenté a sugus que no valía la pena seguir ya que no había pique y me sugirió hacer dos pasadas en la "iribú".
Hicimos la primera pasada en la Iribú sin respuesta y ya preparé el cierre de la nota, comenzamos la segunda pasada y nuevamente Patri clavó un dorado, éste ya era muy grande debía andar en los 8/9 kilos mucho trabajo le costó arrimar semejante pez a la lancha, pero finalmente lo doblegó.
Ya volvíamos a la costa y al pasar por "la palmerita" ya en la costa del paso, sugus me dice: -me llamó la piedra, pasamos ??, había todavía luz como para intentarlo y estuvimos de acuerdo, empieza la pasada y Patricia clava un dorado de esos que no se olvidan, le empezó a sacar nylon, la paseó por toda la lancha, pero con fuerza y paciencia logró cansarlo y arrimarlo a la lancha, fué una fiesta, debía andar por los 12/13 kilos, realmente un hermoso dorado pescado en tiempo de descuento.
Muy felices retornamos al hotel comentando la excelente pesca, y algo que tendré muy en cuenta en el futuro, hay que pescar hasta el Último Minuto.
Quiero reiterar que he visto incumplimiento de la disposición que prohibe la pesca con muerte de dorados, el control de fauna es deficiente y solamente se los ve sábado y domingo. Además, en lugar de allanar los complejos, deberían ir donde todos saben que se acopia dorado para la venta, que son los mismos de siempre, pero parece que perdieron la dirección.