Canto a mi rio
en cada una de mis singladuras
vas completando la filosofia
de dejar mi vida se consuma.
De la mano de mi padre fue primero
y su voz vengan a el en busca de horizonte
de respuesta cabal a las preguntas
de consuelo final al desconcierto.
Pasan los años, tus misterios quedan
cuantas veces, aun, vas a asombrarme
padre viejo, hijo mio, hermano rio.
Por mas lejos que este, vuelvo a tus ondas
y la barra del timon me exige rumbos
dejar la amarra es intimo goce y
la confianza plena del regreso.
Guardas seguro ambitos de duda
como la arena de punta baldosas
o los bancos arteros, playa honda.
Donde alguna vez hicimos un asado
cuantos misterios me reservas, rio.
Algo es para siempre, no me gallas
en la ansiedad de todos mis regresos
el viento fresco de tus vibrazones,
la cabellera sauce en las orillas,
el ronco crepitar, la sudestada,
tuviste mi promera lagrima y
bebiste mi primer sonrisa al aire.
Confiadas a tu seno infinito
tendras estas ultimas dos, sera consuelo.
No puedo olvidar tu baile y tus sonidos, acompañado
siempre por el coro de tus pajaros amigos
que solo se puede comparar a las cuatro estaciones
de Vivaldi.
Te fuiste lejos un dia, y dejaste la orilla vacia
otra vez te vestiste de verde y me hiciste llorar.
Se que los hombres toparon con escombro tu ruta,
te pido perdon por todo esto, por todo esto.
Jamas me olvides rio y no te escondas, estas muy dentro mio.
Para un gran amigo Jorge Vicente de PEZCALANDIA
Buenos Aires, 27 de octubre de 2008
De Rodolfo Perri
Periodista, cazador, pescador y ambientalista
Estimado Rodolfo, muchisimos años que nos conocemos, fue en Faro Motors (en lo de tu hermano, recordas? en La Lucila) para los que lo recuerden, yo por ese entonces un pibe que le gustaba pescar, despues nos vimos nuevamente en tu pasaje por la prensa, el tiempo nos separo y el mismo nos reencontro.
Muchisimas gracias me llena de orgullo y hasta me hiciste lagrimear.
Jorge Vicente
Solo un amigo mas de Rodolfo