jueves, 21 de enero de 2010

Costanera invadida de pescadores de dorados

Ha llegado un informe a Pezcalandia de El Litoral, que los pescadores y de los no tan deportivos, han invadido la costanera.
Algunos pescados van de los 2 kilos hasta los 14, según testimoniaron en la costanera capitalina.
Veteranos pescadores indicaron que desde hace varias décadas no se sacaban dorados en el lugar. Por la creciente del río, Prefectura y Fauna y Flora vallaron la punta, aunque muchos no lo respetan.El hombre pescó un dorado en la San Sebastián, una zona de gran concurrencia de pescadores.La Punta San Sebastián se convirtió en las últimas semanas en el punto predilecto de los pescadores debido a la presencia de un importante cardumen de dorado y aseguran que por estos días se llegan a sacar ejemplares de hasta 14 kilogramos, por lo que hay centenares de líneas, cañas e inclusive lanchas para alzarse con uno de estos peces.
Actualmente está prohibida la pesca en el lugar por el peligro que reviste la zona debido a la crecida del río.
A lo largo de esta semana la costanera “General San Martín” se volvió en un lugar repleto de pescadores, pero particularmente la Punta San Sebastián registra en determinados horarios el punto de mayor concentración por la presencia de dorados en esa zona del río. “Hace casi 30 años que no había dorados en la Punta San Sebastián”, afirmó Jorge, pescador experimentado que estaba el fin de semana con su equipo a la espera de alguna pieza.“En el extremo de la punta llegó a haber hasta 60 personas con líneas y cañas, por lo que pescar se hizo bastante dificultoso”, agregó el veterano pescador.
Como ejemplo de ello, en la tarde del viernes, tanto en la zona de la Punta, como en un sus cercanías, pudo verse una cantidad aproximada de 100 pescadores de todo tipo con sofisticadas cañas, hasta con líneas en mano, pasando por los tradicionales “mojarreros”.Debido a la presencia del importante cardumen de dorados, los ejemplares obtenidos por los pescadores varían entre los 2 y 14 kilos.
“Hace 2 días venimos sacando doradillos pequeños, de no más de 3 kilos, pero la semana pasada se llegó a sacar peces de hasta 14 kilos”, aseguró un pescador apostado en el lugar. “Si el pez es muy chiquito, se debe devolver porque no sirve siquiera para comer y además está prohibido retenerlos”, agregó Martín, otro pescador que estaba con su hijo.Pero no todos pescan con la intención de consumir, sino por la aventura que significa atrapar un dorado. “Es el pez más inteligente y difícil de pescar, ya que se requiere de anzuelos gruesos y mucha paciencia, por lo que atrapar uno genera mucha adrenalina y alegría”, afirmó Jorge.
La presencia de tantas personas en la Punta llamó la atención tanto de la Prefectura Naval como de la Dirección Provincial de Flora y Fauna, por lo que se decidió cerrar el lugar para prevenir incidentes en el río crecido. “Aunque patrullamos y tratamos de que la gente no ingrese a la Punta ni a la costa, es imposible detenerlos porque son demasiados”, afirmó un prefecturiano que estaba en las cercanías.
“Por más que los alejemos, al poco tiempo vuelven sin darse cuenta del peligro que corren al estar tan cerca del río” agregó.Pero no solamente se pueden observar pescadores apostados en la costanera, sino también algunas lanchas, lo que causó el enojo de muchos aquellos pescan desde la tierra.
“Cada lancha saca entre 10 y 12 dorados por día acercándose en el remanso, pero nadie le dice nada”, afirmó un pescador que estaba al costado de la Punta. “En cambio si nosotros nos acercamos para sacar nuestro sustento diario, nos sacan las cañas y elementos”, indicó enfurecido.
Fuente el litoral
Photo Archivo Pezcalandia