Difundimos en Pezcalandia que Marcelo Arbeláez, geólogo de la Universidad Nacional con posgrado en Biología y uno de los montañistas más reconocidos en la historia del país, estuvo en Travesía BLU hablando de su recorrido, la perseverancia y motivación que se debe tener para cumplir las metas propuestas.
Su pasión por el montañismo empezó desde que tenía 16 años, momento en que subió por primera vez al nevado del Tolima.
“En el colegio, por querer hacer algo diferente, con unos amigos nos paramos frente al mapa de Colombia y dijimos: vámonos al lugar que esté más cerca de la nariz. Ese lugar resultó siendo el nevado del Tolima, sin tener idea alguna de cómo acampar y demás cosas”, afirmó Arbeláez.
Así, sin haber contado todos los percances por los que tuvo que pasar tras su travesía por el nevado del Tolima, nació en él una nueva motivación por el cual dedicarse durante años.
“Cuando mi papá vio las fotos que nos tomamos ese día, me dijo “usted es un alpinista”. Desde ahí generó en mí una emoción grande, porque por primera vez me veía como algo diferente a mis hermanos”, señalo en montañista.
Aunque en 1997 Marcelo Arbeláez intento subir el monte Everest, alcanzando 8200 metros, fue el 24 de mayo de 2001 cuando logró llegar a la cima.
“Obtuve muchos reconocimientos, pero no me sentía satisfecho y eso paso porque yo no me lo había reconocido, yo había esperado el reconocimiento de los demás y por eso hubo que compartir la historia de mi vida con otras personas para sentirme completo”, reconoció.
Montañas como el monte Kilimanjaro en el 2002, el Aconcagua y el Elbrus en el 2003, el McKinley en el 2004, entre otros, han sido algunos de los tantos momentos en los que Marcelo Arbeláez ha sido orgullo colombiano.
Finalizó aconsejando que hay que “encontrarles sentido a las metas, el para qué” y que contó que es necesario que incida no solamente en sí mismo, sino en el entorno, pues “todos tenemos un Monte Everest al que queremos llegar”.
Fuente Blu Radio