Difundimos en
Pezcalandia èste increible paraíso, Sombrero Caye, ubicada en pleno Mar Caribe
está en venta por un precio que ronda los 358.000 euros. Se trata de
una isla que cuenta con cerca de 3.000 metros cuadrados localizada en un
entorno paradisiaco. Un desembolso que parece desorbitado, pero que no lo es
tanto al compararlo con los precios de las viviendas de muchos distritos de
Madrid -no sólo del Centro- y de Barcelona.
Mientras en España
se debate sobre la existencia o no de una burbuja
inmobiliaria en el alquiler y la venta de vivienda, en el
otro lado del Océano Atlántico se subasta una isla por menos de 130 euros el
metro cuadrado. Una cantidad irrisoria si se compara con el precio medio
del metro cuadrado a nivel nacional: 1.886 euros, según datos de Fotocasa.
Esta comparativa es
aún más espectacular si se toma como referencia el precio medio del metro
cuadrado de Madrid -2.940 euros- o el de Cataluña -2.531 euros-, según datos
del mismo portal inmobiliario. Por menos de la mitad de lo que puede pagar una
persona por alquilar una habitación en la capital o en la Ciudad Condal -400
euros- es posible comprar una isla en pleno Mar del Caribe.
El activo en
concreto recibe el nombre de ‘Hat caye’ -sombrero caye-, con una extensión
de 0,7 acres -2.832 metros cuadrados- y ubicado en las tranquilas aguas
del atolón ‘Lighthouse Reef’, uno de los únicos cuatro atolones en el
hemisferio occidental. Además, esta isla se encuentra muy cerca de dos sitios
del Patrimonio Mundial de las Naciones Unidas, el Gran Agujero Azul y el Parque
Nacional ‘Half Moon Caye’. El atolón es un lugar de peregrinaje para los
amantes de los deportes, la naturaleza y una de las pocas gemas que quedan en
el Caribe.
Una isla en
pleno Mar Caribe por menos de 130 euros el metro cuadrado
‘Lighthouse Reef
Atoll’ es conocido por sus extraordinarias oportunidades para el buceo, el
snorkel, la fotografía, la vela, la pesca deportiva y recreativa, el kayak de
mar, la observación de aves, la natación y sobre todo, por el descanso.
‘Hat caye’ no ha
sufrido grandes desarrollo. Se puede decir que es un isla prácticamente virgen.
En la actualidad, sólo existen un par de cabañas de pescadores con una cocina y
dos dormitorios. El cayo también tiene un gran muelle con un calado de 6-7
pies capaz de amarrar cualquier embarcación. Además, tiene algunos
manglares costeros entremezclados, playa de arena y coral frente al mar, y está
salpicada de árboles sanos que incluyen palmeras, boj y ziricote.
Fuente Merca2