Les contamos desde Pezcalandia que los pescadores del siglo XXI
vienen con conciencia ecológica, y eso se traduce en hacer de la pesca con
devolución una filosofía para los aficionados, que saben que cada vez somos
El
que nos permite este tipo de clavada es el anzuelo circular, circle
hook,
que cuenta con una fácil extracción debido a que se clava sobre la tijera de la
mandíbula.
Un poco de historia
La revista Forbes en 2005 incluyó al
anzuelo como una de las 20 principales herramientas de la historia de la
humanidad. Mucha agua ha corrido bajo el puente en la evolución de
este elemento vital para la pesca deportiva; hasta la aparición de los anzuelos
circulares a principios de la década del 70, diseñados por los
japoneses específicamente para pescadores comerciales que los utilizaban en sus
espineles. A diferencia de los anzuelos en formato J, los circle hook mostraron
un nivel de efectividad enorme en la captura de diferentes especies, sin más
ayuda que la propia tensión de la línea.
Poco
tiempo después entraron en el radar de los pescadores deportivos y varias
marcas comenzaron a fabricarlos en diversos tamaños que se adaptaban a las
necesidades de los aficionados. Al poco tiempo, su
efectividad comenzó a propagarse a nivel mundial y empezaron a verse muy
asiduamente en los comercios. Por desgracia, en nuestro país
pasaron casi inadvertidos para la mayoría de los importadores locales.
Diseño
Los
anzuelos circulares tienen como característica principal su punta en un ángulo
de al menos 90 grados con respecto a la pata. Este diseño tiene como fin
producir que la clavada no sea en la garganta ni en las vísceras del pez. Por
su forma, aun si la presa traga la carnada, el
anzuelo se desplaza y se fija al costado de la boca, lo cual nos permite
devolver nuestras capturas con una tasa de sobrevida altísima.
Muchos
estudios reflejaron que uno de los factores más importantes en la supervivencia
de los peces liberados por la pesca se relaciona con el lugar donde se produce
el enganche. Específicamente, se ha demostrado que las chances de sobrevivir se
reducen en gran medida cuando se involucra la garganta o las vísceras. Durante años la IGFA (International Game Fish Association) viene
profesando el uso de anzuelos circle hook. A partir de estudios
realizados en Florida, Estados Unidos, se pudo constatar que en el 90 % de los
strike con presas grandes, los anzuelos circulares se enganchan en los músculos
de la boca.
Otro
dato no menor es que, con el anzuelo clavado en la mandíbula en vez de las
vísceras, el pez pelea mucho más, lo cual lo convierte en un rival más
atractivo para nuestras expectativas. Pensando en los peces
cazadores de nuestras aguas, como dorados y tarariras, el hecho de que el
anzuelo se clave al costado de la boca, lejos de los filosos dientes, nos
permite el uso de fluorocarbono en vez de acero, o de cables de acero más
livianos de los que utilizamos habitualmente.
La técnica
Los
anzuelos circulares brindan muchos beneficios para los pescadores, pero
requieren algunos cambios menores en las técnicas de pesca habituales. Nalda,
pionero en su uso en el país, lo explica así: “En general,
recomendaría que los comiencen a utilizar para la pesca de fondo, teniendo en
cuenta dos factores simples pero muy importantes. El primero, no tapar la curva
del anzuelo con la carnada. Y el segundo, posiblemente el más difícil, aprender
a no clavar bruscamente ante el pique”.
¿Y cómo
hacemos para clavar? Para la pesca de fondo, cuando el pez come la carnada y
antes de enrollar, hay que darle tiempo para que trague completamente el
anzuelo. No hay que introducirlo tirando bruscamente de la caña, porque esto lo
sacaría de la boca del pez. En muchos casos, el propio peso del plomo
es suficiente para fijar el anzuelo al costado de la boca del pez, sobre todo
si estamos pescando especies de piel como el bagre de mar,
cuyos aparejos acostumbran a llevar pesos importantes para fondear la carnada.
Ablandar el equipo
La idea de
cambiar el chip de la clavada nos obliga a replantearnos la técnica de pesca
cuando usamos este tipo de anzuelos. Es recomendable utilizar
una caña un poco más blanda de lo habitual, o en su defecto probar con nylon en
vez de multifilamento en la carga del reel. Recordemos que
debemos dejar que sea el propio pez quien se acomode el anzuelo en la posición
correcta y, para ello, basta con que mantengamos la tensión.
La idea de
este diseño es reducir la presión necesaria para clavar el anzuelo. Su punta
está girada hacia adentro, lo que hace que se deslice hacia el punto de resistencia
y se ensarte en la mandíbula o en la esquina de la boca del pez, que es quien
ejerce la presión. Lo ideal ante el pique
es esperar el tiempo suficiente para que el pez tenga la carnada en la boca, y
luego tensar lentamente y recuperar carga con el reel de manera lenta y
constante, hasta sentir el peso de nuestra captura. En caso de
una llevada firme, muchas veces alcanza con ajustar el freno del reel o apoyar
el pulgar sobre el tambor, en caso de usar rotativos.
En
definitiva, el anzuelo circular es el ideal para quienes practicamos la pesca
con devolución, ya que aumenta la tasa de sobrevida. Además, tendremos un
premio extra: una vez que nos
acostumbremos a su uso, el porcentaje de piques concretados será altísimo y los
peces pelearan más. Es hora de animarse al cambio.
Fuente
Total News