Así como tiempo atrás varias organizaciones defensoras de los animales se disgustaron con Gwyneth Paltrow por su decisión de protagonizar una campaña publicitaria de la firma Tod’s, donde aparecía cubierta por prendas aparentemente confeccionadas con piel de zorro, ahora es Liz Hurley quien ha despertado el enojo de una gran cantidad de activistas de PETA.
Es que, tal como informa El Universal, esta modelo y actriz británica de 41 años ha aceptado, a cambio del pago de 300 mil libras esterlinas (cerca de 456 mil dólares), convertirse en la imagen de la nueva campaña de la firma estadounidense Blackglama, una marca que comercializa sus productos bajo el eslogan de producir “el visón más fino del mundo”.Como no podía ser de otra manera, este hecho generó malestar entre los integrantes de la organización Personas para el Tratamiento Ético de los Animales ya que, según manifestaron, Hurley, a diferencia de la cantante británica Leona Lewis (quien rechazó una millonaria oferta de Harrod’s para no traicionar su ideología ecologista), ha aceptado participar de una iniciativa desde la cual se intenta promover el uso de artículos de piel.“Su guardarropa ahora está muerto, como su carrera artística. Es impactante que haya aceptado dinero por portar piel de visones bebé, que son desollados a los seis meses para los lujos de Liz”, aseguró un portavoz de PETA, quien aprovechó la oportunidad para recordar que, en la actualidad, “millones de animales son electrocutados y desollados vivos”. ¿El motivo de semejante sufrimiento? Pues, como podrá imaginarse más de un lector, para poder ofrecer al mercado lujosas prendas confeccionadas con pieles.
Fuente Blog verde
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