Llevaba toda la semana planeando mi salida de pesca del fin de semana, intentaría capturar el lucio de la tabla que se me escapó hace unos meses y que no había vuelto a ver pero intuía que por allí andaba, cargue el material compuesto de una caña de 6,6” de hasta 3oz de potencia y un reel Abu Garcia Black Max cargado de linea de 17lb, en cuanto a señuelos estuve utilizando Swimbaits de gran tamaño hasta 8”.
Llegué a eso de las 3 de la tarde al río, el mismo posee una muy buena población de lucio pequeño pero los más grandes escasean, empiezo a pescar la tabla del río sin obtener picada alguna, pasa la tarde y solo un pequeño lucio se lanza sobre mi señuelo pero se suelta en la lucha, la luz cada vez es mas débil y empiezo a pensar que el gran lucio que se me escapó hace unos meses, ya no habita esta tabla, en este momento y después de probar varios artificiales y distintas modalidades, me encuentro pescando con un Swimbait multi articulado imitación trucha marrón de 6”, cuando lanzo mi artificial a la otra orilla y empiezo una recogida lenta, de repente veo como se agita el agua tras mi artificial y la picada es brutal, el lucio empieza una fuerte pelea intentando escapar aunque esta vez no será así, logro acercarlo a la orilla y después de tanto tiempo nos volvemos a ver las caras aunque esta vez he ganado yo, es impresionante el color azul intenso de su boca y su librea que aunque no hay mucha luz se aprecia bien, consigo hacerme alguna foto y le devuelvo a su medio con la esperanza de volver a fotografiarme con el en otra ocasión.
Es imprescindible el capturar y soltar si queremos preservar nuestros rios y embalses y poder disfrutar de la pesca en el futuro, cuando vives una experiencia de este tipo y consigues una buena pieza que se te había escapado en algun anterior dia de pesca, la satisfacción que te proporciona es mucho mayor y nuestra afición por este noble deporte aumenta más si cabe.
Espero que mis amigos argentinos disfruten tanto con este relato como yo con su captura, un saludo muy fuerte desde España.
Por Carlos Garcia Arroyo
Para Pezcalandia
Corresponsal en Torella de Montegri - Girona - España