Pesquera Coloso se suma a la corriente del 'pez dorado'. En Pezcalandia, recibimos este informe desde la república de Chile, el que por sus características damos a difusión.
La empresa Pesquera Coloso se encuentra abocada a la etapa de engorde de ejemplares de pez dorado o jurel de aleta amarilla (Seriola lalandi) en su planta ubicada en la bahía de Tongoy, Región de Coquimbo.
Esta especie, que tiene una alta demanda en Asia, y en especial en Japón, está captando el interés de diversas compañías y entidades como Fundación Chile, históricamente ligadas al negocio de la pesca y la acuicultura de Chile.
El gerente general de la firma, Domingo Jiménez, dijo que “Pesquera San José concluyó que esta especie era un potencial acuícola de interés para el norte de Chile y consiguió la aprobación para un proyecto de investigación”.
Así, después de comprar alevines a la empresa Acuícola del Norte S.A. (Acuinor), que los produce en Caldera, inició la etapa de engorda en la bahía de Tongoy, explicó el empresario a Diario Financiero.
Los directivos de Pesquera Coloso esperan obtener la primera cosecha en febrero de 2010, cuando los peces alcanzarían el tamaño comercial de 3,5 kilogramos.
La firmeza de la carne, el color blanco y el contenido de aceite omega 3 convierten al pez dorado en un recurso apto para hacer sashimi y sushi.
Además del interés de los consumidores asiáticos, es un pescado requerido por los mercados europeo y estadounidense, donde podría ser una alternativa al atún, que presenta síntomas de sobreexplotación, especialmente en Europa.
Otro factor favorable es el buen precio que alcanza en el mercado internacional: cada kilogramo de pez dorado puede valer casi un 100% más que el de salmón.
“Por un kilo de dorado se pueden pagar entre USD 7 y USD 8, mientras que el salmón no pasa de USD 3 a USD 4. Ésta y otras cosas hacen interesante este negocio”, afirmó director del departamento de Acuicultura de la Universidad de Antofagasta, Rodolfo Wilson.
En febrero pasado, Acuinor obtuvo su primera producción de juveniles de jurel de aleta amarilla, luego de cuatro años de trabajo y de haber pasado por diversas etapas.
La firma invirtió USD 5,3 millones en el proyecto, según informó su gerente general, Daniel Elton, y cuenta con el apoyo de Innova Corfo.
Tras adelantar que este año esperan concretar sus primeros envíos al mercado mexicano, el empresario vaticinó que la producción de pez dorado podría llegar a competir ‘mano a mano’ con la salmonicultura hacia 2015.
Por Analia Murias
Fuente editorial@fis.com
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