lunes, 10 de diciembre de 2012

Evolución del agujero de la capa de ozono


En Pezcalandia te contamos que el agujero en la capa de ozono, aparece en la Antártida entre agosto y septiembre, cuando las temperaturas son más frías, y se cierra entre noviembre y diciembre. El ozono (O3), es un gas que para protege la Tierra de las radiaciones ultravioleta provenientes del Sol, causantes de cáncer de piel y otras enfermedades en personas y animales.

El agujero de la capa de ozono se descubrió en 1974, y poco a poco la población fue siendo cada vez más consciente de las consecuencias que éste implicaba para la salud humana, animal y en general del planeta. Estudios pusieron de manifiesto que los responsables de la destrucción de la capa de ozono son gases como los clorofluorocarbonos (CFCs), utilizados durante casi medio siglo como componentes de aerosoles y refrigerantes.
En 1987 se firmó el Protocolo de Montreal para preservar la capa de ozono, en el que los países se comprometían a reducir el uso de sustancias que dañasen el ozono. Desde entonces, el agujero de la capa de ozono se ha ido cerrando poco a poco, y alcanzó una superficie de 20,8 millones de kilómetros cuadrados en septiembre pasado, su menor tamaño en 25 años. Sin embargo, la Agencia Meteorológica de Japón sostiene que el orificio no ha crecido tanto durante 2012,debido a que las temperaturas en la región polar han permanecido relativamente altas tanto en julio como en agosto.

Consecuencias del agujero de la capa de ozono
Se calcula que alrededor de un millón de personas tienen cáncer de piel debido al agujero de la capa de ozono. Por eso, se recomienda restringir la exposición al sol, especialmente en los meses en que el agujero es mayor.
Recientemente, investigadores del CONICET han descubierto que el agujero en la capa de ozono ha cambiado el patrón de los vientos del hemisferio sur, lo que implica que las lluvias en los bosques patagónicos se hayan visto reducidas. Hablamos de coihues, cipreses y araucarias del sur de Argentina y Chile. Esto complicará la conservación de estas especies debido a una mayor incidencia de incendios y a una menor capacidad de recuperación frente a otras presiones ambientales, como enfermedades, competencia o el pastoreo intensivo.
Sin embargo, ocurre lo contrario en otros lugares del hemisferio sur, concretamente en Nueva Zelanda y Tasmania donde en las últimas cuatro décadas los árboles de sus bosques registraron la tasa de crecimiento más importante de los últimos años, debido a un aumento de las precipitaciones.
Esta alteración en las precipitaciones está asociada a otro fenómeno conocido como la Oscilación Antártica del Hemisferio Sur (OAHS), que es como un anillo de diferencias de presiones que se forma en la atmósfera del continente antártico y controla la variabilidad climática en el hemisferio sur. Sin embargo, aún no sabemos las repercusiones que estos sucesos tendrán a nivel global y a largo plazo.
En cuanto al agujero de la capa de ozono, la comunidad científica predice que para el año 2050 y a este ritmo, volveríamos a tener los niveles de ozono que teníamos en la década del 60 o 70 antes que comenzase su destrucción.

Fuente El blog verde