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Amigos de Pezcalandia, quiero compartir éste relato con ustedes.
La semana pasada tuve la suerte de encontrarme con amigos de la provincia de Chaco, amigos que la vida y la pesca deportiva decidieron regalarme, ellos son Carlos, Basilio, el pelado y su hermano Gustavo.
Llegué al paso el día viernes y decidí llamarlos para encontrarnos en el lugar donde mas nos une la amistad, el Río Paraná. No dudaron en organizar la pesca y de pasarme a buscar por el muelle de anfiteatro, el sábado por la mañana.
Ocho de la mañana estaba firme, parado en el muelle, la impaciencia me carcomía la piel, cuando veo la embarcación que encara hacia donde yo estaba, la emoción y la adrenalina subía segundo a segundo.
Después de los saludos de rigor, salimos rumbo a la zona elegida, para hacer los primeros lances; llegamos en pocos minutos y Carlos dice -Garete...!!! Encarnamos con morena grande, otros con botellona y Gustavo con anguila.
La bajada fue larga y sin resultado positivo, el viento fue un factor determinante, nos alejó mucho de la zona deseada. Basilio tomo el timón de la embarcación y dijo con voz de mando.- Ahora vamos hasta la boya roja y nos largamos...vamos a ver si estos bichos se dejan de hacerse rogar.
Llegamos y colocó la lancha de modo de todos podamos pescar, bajamos unos 500 mts. y tengo un toque, clavo y traigo, sorpresa una boga de no mas de 3 kg., cuando quisimos levantar se suelta.
La pesca sigue mientras yo encarno de nuevo, cuando voy a tirar, Gustavo tiene un pique, le da corrida y clava, pero el bicho sigue sacando tanza...- Ese es lindo...!!! juntamos las líneas y Basilio encienda el motor y arriba en busca de la presa que no estaba dispuesta a entregarse fácilmente, sin dar una dura pelea.
Después de unos duros 15 minutos de lucha, aparece la cabeza de un cachorro de surubí, que tenía polenta para seguir un rato mas luchando.
Los amigos me dieron el honor de levantar este hermoso toro, que rondó los 15 kg.
Llegaron las fotos y todo era alegría en la lancha, cuando nos dimos cuenta, ya era hora de ir a la costa, el sol estaba fuerte y el calor pegaba cada vez mas; así que de ese modo, nos fuimos en busca de una costa, para preparar el campamento y comer el famoso frito de pescado.
El almuerzo estuvo lleno de anécdotas y cuentos de pesca de los mas variados, pero esto es así, los pescadores tenemos eso que se llama " charlas de la costa " donde nadie se queda sin contar algo.
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La segunda mitad de la jornada, arrancó a eso de la 17:00 hs. la cantidad de lanchas pescando en la zona, no permitía cambiar la modalidad, debíamos seguir con carnada y haciendo garete.
En la primera pasada, Carlos pesca un dorado de porte pequeño, el cual se les saca las fotos de rigor y se va al agua, como corresponde.
Salimos nuevamente aguas arriba para hacer otra pasada, por los veriles; cuando llegamos nos largamos cerca de un banco de arena, que apenas se lo podía ver.
Transcurrido unos 200 mts. y en el borde del veril, tengo mi segundo pique del día, es una linda corrida, le doy línea y pego la clavada, a unos 80 mts. pega un salto...-Es un dorado..!! la lucha comienza, pero no es tanta, porque el dorado no es muy grande, tiene mas o menos unos 5kg., fotos y al agua.
Bueno amigos y seguidores de esta linda página www.pezcalandia.com.ar, sólo me queda agradecer, como lo hago siempre, a los chicos de la redacción, que siempre se portan para que ustedes, los pescadores deportivos puedan vivir, en su imaginación, éstas historias que les relato, que no son mas que vivencias que tengo con amigos.
Gracias, gracias, mil gracias, hasta la próxima.
Por Carlos Tortul
Guía profesional
Staff - Pezcalandia
Reconquista - Santa Fe
