
"Los
dos partieron desde el cañón de Malibú y decidieron seguir las señales que
había por todo el recorrido para no tener problemas a la vuelta.
El
problema surgió cuando Jake se empeñó en escalar una pequeña colina que no
venía en la ruta. Al bajar de la montaña, los dos se dieron cuenta de que no
sabían cómo seguir y, a partir de ese momento, caminaron de forma
improvisada", aseguró un miembro de su círculo cercano al tabloide
National Enquirer.
A medida que su problema se
fue agravando con la llegada de la noche -el momento propicio para la aparición
de serpientes y coyotes- y la caída brusca de las temperaturas, los dos
artistas empezaron a preocuparse seriamente por su bienestar y terminaron
pidiendo ayuda desesperada a un grupo de exploradores que, bastante mejor
preparados que ellos, les ayudaron rápidamente a encontrar el camino de salida.
Fuente:
El diario de Coahuila