Desde la redacción de Pezcalandia, difundimos un nuevo relato
de nuestro colega Carlos Tortul.
Hola
queridos amigos pescadores deportivos, seguidores de PEZCALANDIA, como todas
las semanas, les traigo una nueva experiencia de pesca con amigos.
Hoy
les quiero contar la historia de una salida al Río Paraná con amigos de Junin,
Pcia.de Bs. As., Daniel, Ruben, Guillermo y Sergio, cuatro buenos pescadores y
mejores personas, ellos pudieron comprobar que la pesca en Reconquista, es y
sigue siendo, muy buena en éstos momentos.
La
mañana era muy cálida y con algunas nubes, el pronóstico no era alentador para
la pesca, pero no íbamos a dejar que las nubes nos detengan, así que salimos
con mucha seguridad en busca de los tigres.
Marchamos
por unos 30 minutos aguas arriba, a un arroyo que conozco muy bien y con la
bajante, los dorados suelen salir a comer, a las bocas de lagunas, donde se
acarduman los sábalos, comida por excelencia de éstas especies.
Al
llegar no notamos movimiento alguno, ni de sábalos, ni de otro pez, entonces
decido empezar haciendo trolling, para ver si activábamos a los dorados; la
primera pasada sin novedad, retomo la subida y en el borde del veril, Ruben
acusa el primer pique, acelero la embarcación, y el dorado salta a unos 50 mts.
la lucha es tensa, ya que Ruben era la primera vez que practicaba ésta
modalidad, el dorado ya está cerca, pero no se entrega.
En
uno de los saltos, pega un cabezazo y el señuelo vuela, el dorado se suelta y
se va.
La
pena de perder el primer dorado, nos dió fuerza para seguir. Arrancamos
nuevamente en la misma modalidad y por la misma canaleta, transcurren unos
minutos y se producen tres piques a la vez, Daniel, Guillermo y Sergio, acelero
y los dorados saltan en distintos lugares, pero no tan lejos uno de los otros, y
sucede lo que no queríamos que pasara, Daniel sufre el corte de la línea y a
Guillermo se le suelta el dorado. A lo lejos, vemos saltar el dorado de Marcelo
con el señuelo en la boca, un verdadera lástima, pero no había nada para hacer;
me concentro en Sergio, que es el único que queda con el dorado prendido en el
señuelo, lo trabaja pacientemente ya que no lo quería perder, la contienda dura
unos cuantos minutos y al final logramos alzarlo a la lancha.
La
jornada continuó con espectacular frito de pescado a orillas del Paraná, la que
duró bastante. Luego de almorzar decidimos que la jornada ya estaba terminada,
logramos tener varios piques y comprobar que los dorados siguen firmes en
Reconquista.
Bueno
amigos hasta la próxima, les dejo un fuerte abrazo a todo ustedes y a los
chicos de redacción de Pezcalandia.
Por
Carlos Tortul
Guía
de pesca profesional
Staff
- Pezcalandia
Reconquista
-Santa Fe
Tel:
3482 - 540796