viernes, 19 de agosto de 2016

Un proyecto del Kirchnerismo, peligra la pesca deportiva en Salta



Les contamos a nuestra comunidad de Pezcalandia que el derecho al libre acceso a los ríos, se ve limitado por el nuevo Código Civil, hay una gran preocupación en los pescadores.
A un año de la entrada en vigencia del nuevo Código Civil en el país, sus consecuencias se comienzan a ver: una de ellas son las restricciones a la gente y el avance sobre los ríos de los emprendimientos privados que ponen en peligro la libre accesibilidad a las costas para actividades recreativas.
La ley promovida por el kirchnerismo transfiere grandes extensiones de terrenos públicos a manos privadas. "Es una cuestión de tiempo para comenzar a ver como el tradicional pescador, que va con su caña a un río, desaparece. Ya comenzaron a florecer emprendimientos que privatizaron los ríos y las playas de los diques”, explicó un abogado amante de la pesca.
Las principales modificaciones en el Código Civil es que ya no son 35 sino 15 metros de costa sin construcciones. Ya no se habla de camino público y el privado podrá repeler intrusos. En resumen, el "camino de sirga” se ve ahora reducido de 35 a 15 metros y ya no será "calle o camino público” con carácter de restricción al dominio privado, sino parte indiscutida de la propiedad privada con la sola restricción de uso, por el cual, el propietario no podrá entorpecer la navegación ni hacer construcciones.
El camino de sirga tuvo como finalidad permitir la navegación, al permitir impulsar las embarcaciones desde la costa para remontar ríos difíciles, pero con el tiempo, numerosos fallos y trabajos doctrinarios, como los de Salvat, Lafaille, Borda y Highton de Nolasco, ampliaron en la práctica ese uso, incorporándole el favorecer la navegación en todas sus formas, el salvamento y la pesca desde embarcaciones.
La actual jueza de la Corte Suprema de la Nación Elena Highton de Nolasco fue todavía más allá en su libro "Dominio y usucapión”, indicando que el camino de sirga está previsto no sólo para la navegación, sino también para el comercio, la pesca y las necesidades de esparcimiento de la población.
Por su parte la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas asegura que se trata de una privatización de tierras públicas. Sin embargo, otros expertos aclaran que el camino de sirga pertenece al dominio privado del propietario ribereño y el código sólo impone una restricción de uso, ya que no se puede construir ni alterar nada.
Desde un principio, la reforma fue polémica y muy criticada, tanto por especialistas, como por los legisladores opositores al kirchnerismo. El proyecto original del nuevo código propuso un artículo exclusivo sobre el derecho al agua. "Todos los habitantes tienen garantizado el acceso al agua potable para fines vitales”, decía la cláusula que el Poder Ejecutivo Nacional, a cargo de Cristina Fernández, quien ordenó eliminar.
Otro punto cuestionado por los expertos es que el nuevo Código elimina la responsabilidad civil por daños en el ambiente y circunscribe al Derecho Administrativo la resolución de conflictos ambientales (artículo 1970). "La preeminencia que se le otorga al Derecho Administrativo para resolver conflictos ambientales es clave en casos de abusos ambientales efectuados por el Poder Ejecutivo. La responsabilidad civil es un límite, pero si no está, el límite se desvanece”, sugiereRomina Picolotti, abogada especialista en Derecho Ambiental.
En tanto el abogado ambientalista Enrique Viale aseguró que estamos ante "la mayor privatización de tierras de la historia”. El nuevo código civil y comercial fue aprobado en 2014, luego de dos años y medio de debate y reemplaza al viejo código redactado a fines del siglo XIX.

Fuente El Intransigente