La experiencia arranca con el tren Cremallera, que sale de Ribes de Freser, en un ascenso de poco más de 40 minutos y cerca de 1.000 metros de desnivel y la única vía para acceder a Vall de Núria. Vegetación, rocas y agua conforman el paisaje mientras osados excursionistas se atreven con la ruta a pie (unas 5 horas desde Ribes, unas 3 desde Queralbs) por escarpados caminos. Hace semanas que se ha derretido la nieve, tardía esta temporada, casi hasta mediados de mayo, y al salir del último túnel, los prados lucen verdes, salpicados de flores amarillas. El aire es fresco, aunque es bueno buscar sombra y refugio en las horas altas de sol. La alta montaña también es para el verano y Vall de Núria, un enclave pirenaico escondido entre montañas, se presenta como el plan perfecto para un fin de semana familiar, de naturaleza o aventura.
Aunque es posible disfrutar de una jornada de desconexión y naturaleza el mismo día, la opción de pernoctar una noche multiplica las opciones de ocio y contemplación del entorno. El hotel Vall de Núria cuenta con una amplia oferta de alojamiento con 75 habitaciones de diferentes tipologías (desde individuales hasta familiares para seis personas) y 20 apartamentos bien acondicionados para albergar familias. Además del alojamiento, las instalaciones ofrecen varias alternativas gastronómicas, desde el bufet libre para desayuno, comida o cena, además un restaurante gastronómico y una food truk informal con terraza para comer al aire libre. También hay opción de picnic para las excursiones.
“Somos conscientes que nuestra oferta es cautiva, que si vienes a Vall de Núria las opciones son limitadas por eso organizamos actividades para disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad de diferentes formas”, explica Raul Anquela, director del hotel. Para completar la oferta del alojamiento, el propio hotel organiza paquetes y actividades para todos los gustos.
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También de noche, hay una salida con barcas en el lago a la luz de la luna (21 de julio y 19 de agosto), así como observación de estrellas a cargo del Parc Astronòmic del Montsec en diferentes fechas.
En Vall de Núria se vive un ambiente tranquilo, marcado por el silencio de la naturaleza y los espacios al aire libre. Además de relajantes paseos, el Hotel Vall de Núria ofrece un paquete de relax de dos días para desconectar de la rutina y disfrutar de la calma de la montaña. El pack incluye dos noches de alojamiento, un masaje relajante y de aromaterapia para equilibrar el sistema nervioso, así como sesiones de yoga en el prado a primera hora de la mañana.
Al margen del paquete de bienestar, el spa del Hotel Vall de Núria ofrece una extensa carta de tratamientos de belleza y bienestar en las mismas instalaciones del establecimiento.
Paquete de tres días para experimentar emociones fuertes en les gorgues de Núria: agua, saltos, toboganes en una excursión en plena naturaleza combinados con el relax y el descanso que ofrece el complejo turístico. El paquete de aventura incluye dos noches de hotel, comidas, guías, equipamiento, neopreno... así como el tren Cremallera de ida y vuelta.
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El barranco de Núria, cerca de Queralbs está considerado uno de los mejores del Pirineo catalán. De alta dificultad técnica, cuenta con un espectacular rapel de 25 metros, impresionantes toboganes de hasta 17 metros y saltos de hasta 15 metros. De unos 1.200 metros de longitud, se pueden invertir cerca de dos horas de emociones fuertes.
Las rutas a caballo, diseñadas para adultos a partir de 15 años, discurren por tres itinerarios distintos: el Camí de les Creus, el Pont de l'Escudé y el Bosc de la Verge, que discurren desde el santuario y pasan por el albergue del Pic de l'Aliga por diferentes senderos de montaña.
Para los más pequeños, Vall de Núria les ofrece la posibilidad de divertirse yendo al lomo de un pony mientras disfrutan de la naturaleza del valle, una actividad pensada para niños con edades comprendidas entre los 2 y 8 años y en el que los padres guían a los animales. Tiene una duración de 20 minutos aproximadamente por los alrededores de los edificios del Santuario. Los ponis se encuentran en la hípica junto a la ermita de Sant Gil.
El barranco de Núria, cerca de Queralbs está considerado uno de los mejores del Pirineo catalán. De alta dificultad técnica, cuenta con un espectacular rapel de 25 metros, impresionantes toboganes de hasta 17 metros y saltos de hasta 15 metros. De unos 1.200 metros de longitud, se pueden invertir cerca de dos horas de emociones fuertes.
Las rutas a caballo, diseñadas para adultos a partir de 15 años, discurren por tres itinerarios distintos: el Camí de les Creus, el Pont de l'Escudé y el Bosc de la Verge, que discurren desde el santuario y pasan por el albergue del Pic de l'Aliga por diferentes senderos de montaña.
Para los más pequeños, Vall de Núria les ofrece la posibilidad de divertirse yendo al lomo de un pony mientras disfrutan de la naturaleza del valle, una actividad pensada para niños con edades comprendidas entre los 2 y 8 años y en el que los padres guían a los animales. Tiene una duración de 20 minutos aproximadamente por los alrededores de los edificios del Santuario. Los ponis se encuentran en la hípica junto a la ermita de Sant Gil.
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Fuente: La Vanguardia
