En Pezcalandia, como es costumbre damos a difusión todo lo relacionado al sector, les contamos que hace unos dias, muy temprano 88 aventureros arrojaron los botes al agua desde el Club de Pescadores de Paraná con destino hacia la ciudad de Diamante y así comenzó el desafío.
No se trata sólo de remar, sino de un encuentro entre amigos unidos por una misma pasión, el contacto extremo con la naturaleza y la experiencia de recorrer 95 kilómetros en kayak o piragua para llegar y recorrer el parque nacional Pre Delta.
Por segunda vez se realizó la travesía organizada por el grupo paranaense Los Kayicidas que culminará mañana con despedidas y promesas de reencuentros.El grupo, que por estos momentos se encuentra recorriendo los riachos del parque, está conformado por hombres y mujeres de Chaco, Corrientes, distintas ciudades de Entre Ríos, Córdoba y hasta una pareja de extranjeros, colombiano él y ella proveniente de Alemania.Mientras preparaban los últimos detalles, cargaban sus termos con agua caliente, botellas de agua, naranjas, las bolsas de nailon con asado ya cocido y un envase que contenía arroz y lentejas, los viajeros relataron a UNO sus historias particulares y las formas en que uno y otro llegaron a formar parte del equipo de expedición.Michel Gass es un ecólogo colombiano que desde hace tres meses realiza una pasantía en la Facultad de Agronomía en Oro Verde. Conoció a su novia Saskia Biebert hace un año y medio en una reunión en una isla cerca de África.“Es una larga historia, básicamente yo vivía allí y ella fue a estudiar el idioma francés y nos conocimos. Hace días ella llegó a Argentina a visitarme y bueno, por intermedio de Daniel (Sant Comaleras) nos enteramos de esta travesía y nos animamos”, contó Gass.Continuó: “Yo monto en bicicleta, y el kayak tiene ciertas similitudes con ello, entonces me enganché, quise aprovechar que tenemos el río al lado”.En cuanto al país, el expedicionista consideró: “Lo poco que vi es muy bonito. En tres meses conocí Buenos Aires, Paraná y otras localidades de Entre Ríos y hace unos años estuve en Bariloche”, dijo.Además, recalcó la oportunidad de poder realizar este paseo, teniendo en cuenta que en Colombia no es tan fácil: “Dependiendo de la zona se puede hacer o no.
Hay algunos sitios en donde no hay que ingresar”, aseguró.A finales de junio Gass regresará a Canadá, donde vive actualmente y Biebert en pocos días parte hacia Alemania.
En cuanto a su pasantía explicó: “Vine para trabajar en manejo de pasturas naturales, que es combinar bosque nativo con ganado. La idea es volver a sembrar el bosque nativo porque presenta muchas ventajas para los pequeños productores, queremos desarrollar un método de siembra eficaz y económico que pueda aplicar el pequeño productor para recuperar los terrenos”, aclaró.Palista con experienciaCon 86 años, Carlos Alberto Tata Goñi, oriundo de Concepción del Uruguay, es uno de los palistas más experimentados.“Hace muchos años que formo parte de estos encuentros, me encanta”, confesó Tata, e incluso comentó que 30 años atrás, cuando aún no existían los kayaks hacía recorridos similares en piragua. “Recorrí todo el río Uruguay, desde Corrientes hasta nuestra ciudad y desde Concepción a Tigre”, contó.Tata forma parte de una delegación de seis personas que vinieron de Concepción del Uruguay hasta Paraná para lanzarse en kayaks sobre el río Paraná. “En nuestra ciudad somos 25 kayaquistas, pero esta vez vinimos pocos, porque el resto tenía compromisos laborales y familiares que cumplir”, explicó.Destacó que “por supuesto que para hacer esto uno tiene que tener cierto entrenamiento, y encontrarse bien físicamente porque son muchos kilómetros.
Lo que me impulsa a mí no es sólo el remo, esto para nosotros significa un gran encuentro con amigos. Cada travesía es motivo de charla alrededor de un fogón y de la búsqueda de pasarla bien más que nada”, relató el consultado.Tata es jubilado, durante su juventud trabajó como vendedor para una empresa de alimentos y el río y el deporte fueron siempre una vía de escape y entretenimiento. “Fui nadador durante muchos años”, aclaró orgulloso.Volver al pagoPor su parte Estela María Venturini contó que es de Concepción del Uruguay, pero hace 20 años que vive en Resistencia (Chaco). “Extraño tanto mi provincia y esta es la excusa perfecta para venir”, expresó.No dejó de considerar que Entre Ríos en cuanto a sus cursos de agua es incomparable.“Esta es la primera vez que hago la travesía hacia el Pre Delta, pero con este grupo en 2008 hice la travesía Rosario-Victoria, y después algunas salidas en el río Uruguay”, confirmó Venturini.También contó que, si bien las familias no los acompañan en estas aventuras, “nos apoyan y entienden que es lo que nos gusta y nos permiten hacerlo”.Ayer esposas, hijos y abuelos despedían y fotografiaban desde el Club de Pescadores a quienes se embarcaban en la travesía por el río.Para aprender a preservarDaniel Sant Comaleras es uno de los organizadores de la expedición y confirmó a UNO que un total de 88 personas se inscribieron para participar del viaje que propone contacto constante con el medio ambiente.
“Es este el segundo año que partimos hacia el Pre Delta y pretendemos darle continuidad”, confesó el organizador minutos previos a la salida.
“Somos un grupo que comenzamos a remar hace varios años y decidimos organizar viajes más que nada porque queremos dar a conocer un lugar rico en flora y fauna, un paisaje completamente natural y protegido, sobre todo para generar conciencia de la importancia de su preservación”, indicó el aventurero entrerriano.Por eso es que durante las noches se instala una carpa y allí los actuales guardaparques dictan charlas y cuentan lo que hacen en el lugar.También narró que son un grupo de aficionados que, como tantos otros, organizan este tipo de expediciones y los contactos se concretan vía Internet: “Tenemos foros en donde se divulga esta actividad, a la que año tras año se suma gente”, contó Sant Comaleras, y para justificar su afirmación ejemplificó que en 2008 eran 43 los palistas y lo comparó con los 88 de este año.Ayer pasaron por Bajada Grande, Paraje La Jaula, La Juanita, Paraje La Virgen, Puerto Alvear y Valle María.Por la noche acamparon en un predio del Complejo Turístico Valle de La Ensenada junto a guardaparques y a la gente del Radio club de Entre Ríos, que nos brindaron unas charlas y muestras. Y además de recordatorios y sorteos, compartieron un locro.Hoy tienen previsto recorrer riachos y meandros por los alrededores del parque, y pernoctarán allí, fogón de por medio y cena de despedida a la luz de las estrellas.Mañana remarán nuevamente hasta el área de camping del parque nacional, y de allí se desarma, se carga y se retorna a la ciudad.
Por Valeria Girard
Fuente Diario Uno