En el entorno privilegiado del Parque Nacional Nahuel Huapi, varias torres vecinas a la laguna Toncek, en el Cerro Catedral, avalan una escalada de alto nivel.
Cuatro horas demanda la aproximación hasta el refugio Frey, creado en 1957. Se destacan la aguja Frey, la M2, La Vieja o El Abuelo; pero hay otras, con vías largas, como la Campanile Esloveno o la Principal. La roca granodiorítica del Frey se presenta templada y amigable en verano, aunque hay quienes hacen tentativas durante el invierno.
El refugio Frey es además un buen destino de escalada en hielo. Valle Encantado, próximo a San Carlos de Bariloche, y zonas de escalada cercanas a las localidades de Esquel y El Bolsón, completan el panorama de escalada en los lagos del Sur.
Tierra del Fuego y El Chaltén:
Practicar cascadismo es un privilegio de los visitantes de Tierra del Fuego. El cerro Alvear tiene en las vertientes sur y sudeste dos cascadas con distinta calidad de hielo: uno poroso y quebradizo; y otro tipo cristal, muy duro. Varían los largos y la pendiente, alcanzando los 90 grados. Hay máscascadas próximas a Ushuaia en el cerro Pelado y el el valle del río Chico. En El Chaltén, ya en Santa Cruz, se forman interesantes cascadas de hielo, varias de ellas en la zona de la laguna y el glaciar Torre.
Pezcalandia, sólo difunde la actividad del sector